cantar siempre el mismo verso pero con distinta agua.


postales de otoño 2.



postales de otoño 1.




Mortalmente me hiere cada beso
incrustado en los labios de la tarde
cuando ya estás tan lejos y tan cerca.
Mortalmente te busco en la crecida
del deseo de ti,
de tus palabras
de tu presencia o solo de tus ojos
abiertos al ocaso.
Mortalmente, la luna
desarma las cuchillas fatales de la noche
y me aleja de todo y de tu cuerpo
ensayando la ausencia
entre cada milímetro del ansia.
Y mortalmente, el sueño
me devuelve tu imagen
reinventada, escondida
en los pliegues azules de algún astro,
de todo lo que ocupas,
del más ciego de todos los secretos.

coming home.


las últimas flores reciben al otoño.


donde el corazón me lleva.


Todo el mundo es tu cuerpo
descalzado de sombras
y abierto a mis caricias.
Ya no hay miedo prendido en mis pestañas
ni palabras ardiendo entre tus labios.
Hoy el mundo es tus ojos y estos sueños
compartidos, eternos, incansables
que enlazaron tu vida con mi vida.
Todo el mundo eres tú, que noche a noche,
pones cercos al mar de mi tristeza
y conviertes las lágrimas en alas.

la altiva soledad de viejos riscos.


se clausuran esperanzas.


vientos de septiembre para acunar cometas.


A Kutxi Romero



temo el regreso de la oscuridad.


Limonada y horizontes

Te debo muchas noches que no hemos compartido,
muchas tardes pensando en el trabajo
y mañanas de prisas y de agobios.
Te debo mil palabras, mil versos, mil canciones,
todo lo que he sentido,
todo lo que he esperado más allá de los sueños,
más allá de esta casa que nos puebla,
de este sillón, de toda la costumbre
que solemos llamar monotonía.
Te debo la amistad,
te debo el miedo
de conjurar la ausencia de tus brazos.
Te debo el hoy, el antes y el mañana
de una noche sin nombre ni principio
que hilvanará este agosto en mi conciencia.

el caso es andar.


mis olivos.


labios... amor.


Tus ojos son más ciertos
en las noches de agosto,
cuando hay un mar de estrellas
que acerca sus orillas
al bies de tu mirada;
cuando el humo concreto
de cansados cigarros
hacen brillar protestas
de párpados insomnes;
cuando la inquieta sombra
de tus altas pupilas
se abandona a un recuerdo.
Tus ojos son más ciertos
mirándose en mis ojos
como si en algún margen del libro del destino
alguien hubiese escrito, 
más allá de esta cárcel,
tu nombre entrelazado con mi nombre.

...yo troncos, frutos y flores, ella riega lo escondido.


being water.



Quiero ser una de ellas.
Una de esas mujeres que has amado
quizás solo una noche.
Una de las que hicieron de tu espalda
un circuito cerrado de caricias,
de las que desdoblaron
un pulso de saliva por tu cuello,
cincelaron tu pecho con su tacto
e incendiaron cenizas en tus ojos.
Quiero sentir desnudo tu desnudo,
al menos una vez,
al menos una.

hug.


tanto, tantísimo calor...



No sabes cuánto añoro 
esa mirada tuya
columpiada en silencios.

Hoy, tan lejos de ti,
con todos mis olvidos
pronunciando tus labios
- esos labios, portales de palabras
que acunan a la tarde – ,
con mis manos, paréntesis abiertos
de no rozar tu espalda
- esa espalda que sueño tatuada
de besos y poemas – ,
con mi tristeza herida
de detener la tuya
- esa tristeza aún desordenada
por tanta incertidumbre – ,
con mis dedos, por fin, que necesitan
el sonámbulo tacto de los tuyos
para creer que existes…

Cuánto extraño tus ojos,
cuánto tiempo
sin esa forma tuya de excavar en mi alma
como si no supieras,
como si no contaran mis pupilas
que en todas mis ciudades
venden billetes hacia tu cariño.

Y tus ojos se olvidan de mis ojos.
Y tú eres el columpio de mi llanto
y a mí solo me quedan tus silencios.

la esperanza, por pequeña que sea.


limitaciones.


vacío.


Bésame en otro horario
o a escondidas,
pero bésame vivo en cada beso.
Ha regresado el frío
de ventanas abiertas,
de seres racionales
pisando corazones,
de los árboles mudos
plantando sus fronteras distraídas
sobre la piel descalza del deseo.

Ha vuelto, como antes,
la soledad de siempre conocida
y los deseos ocultos de ser muerte,
de descansar de todo y de tus labios,
de artificiales lunas
y de sueños
hervidos en la sangre de la nada.

Hunde tus besos largos en mis besos,
que solo así inventaste la esperanza
y la lucha dormida,
tras mis ojos.

Bésame en otro sueño
con tu nombre hecho beso y con tu carne
sostenida de pronto
entre tanto desorden.
Pero si ya no sientes el deseo
al unirte a mis labios,
si la pasión se ha convertido en roce
al contacto cansado de los días,
dime que no es por mí
y que aún me quieres,
y busquemos, sin prisas, otro idioma
para incendiar el frío que me habita.

welcome, Insomnia.


XIX.



Cuando encienden mis labios esos muros
que creamos con tiempo y con excusas,
el mundo se hace espalda,
viga o reja
que separa el insomnio de los sueños.
Tantas fábulas pueblan las esquinas
de este collage enfermo del olvido…
Tantas palabras sordas,
tanto margen…
Y no reconocerte siempre cerca
detrás de los secretos.
Cuando encienden mis labios esos muros,
renombro las fronteras
y separo tu tiempo de mis alas.

setting sun.


...e che sospiri... la libertà.


mi horizonte.


No puedo darte más.
Me tiembla el alma
cada vez que me pongo de puntillas
para hacer que mi luz llegue a tus ojos.

amanece.


welcome.


Solo cinco segundos
para escribir tu nombre en una esquina
de este cuaderno cómplice;
tu nombre o esos nombres que te pongo
y que tú no sabrás
ni ahora ni nunca.
Nombre de mar, de viento,
que suena a despedida,
a esas horas gastadas descubriéndote,
a ese dolor antiguo
de saber que el adiós es la palabra
más vieja y más usada de la historia. 
Nombre de libertad que abre mis labios
y suena a otros lugares, a otras vidas,
a mis ojos cansados de seguirte,
a otras manos flotando por tu cuerpo.
Nombre de tiempo ajeno que me ciega,
que me sangra en los ojos,
que destapa
la tempestad de todas mis raíces
y me arranca, me eleva, me transporta.
Solo cinco segundos
para escribir tu nombre, cuanto siento
y cuanto sé de ti
… cuanto te amo…

sky.


Oz.


paseos.


Te imagino, te pienso, te dibujo,
siento anhelos de ti, miro tus fotos;
tus ojos son más bellos que la vida
y tus labios, fronteras de mis dedos.

Te acaricio, te sueño, te desnudo
en las horas cansadas de perderse
y escalo cada acorde de tu ausencia
desde esta estrella herida que nos une.

Hoy te estoy esperando. No hay respuestas.

Y mi noche eres tú,
mi piel, mi alma…

pour moi.


waiting.


momentos.



1999

A lo mejor un día
el mundo se convierte en un paisaje
sumergido en la magia,
donde un acantilado,
desprevenido y mudo,
evoca fieramente los silencios
de este sordo deseo de abrazarte
y de sentirte vivo.

A lo mejor un día
el mar se vuelve en lecho y nos invita
a destrozar el tiempo entre sus olas,
a recorrer tu cuerpo sin el miedo
de ser reconocidos y
a desear tus manos
en mi cuerpo
que siempre será tuyo.

A lo mejor un día
mi alma se desnuda a tu desnudo
de piel reconocida
para ascender, nocturna, hasta tu boca
o descender, abierta, hasta tu noche.

A lo mejor un día,
más allá de los soles y las lunas,
buscaré en tus palabras el deseo,
temblaré en tu cintura,
entre tus piernas,
y, acompasada al ritmo de tu pecho,
me cubriré por siempre con tus brazos.

mi paz.


campanillas.


fontaine.


Acheron

No sé por qué te escribo tantos versos.
No sé por qué te ofrezco los recortes
sangrados de mi alma.
No sé por qué la aurora
se barniza en tus ojos,
de claridad profunda y misteriosa.
No sé por qué las tardes
se vuelven diferentes cuando tú das señales
de esa vida tan propia
y tan deshabitada y tan secreta.
No sé por qué la noche se hace noche
al filo de un deseo repetido
hasta volverse sueño.
Sé que te has instalado en mis cortinas
y dominas mis vistas, mis cuadernos,
y todos los relojes de mi casa. 

poppy.


más allá.


life.


Cuando llega la noche y nos ataca
con su veneno sucio,
con su niebla,
todo en la habitación se vuelve triste.
Tus ojos son la sombra de tus ojos
y los míos el alma a la deriva
buscando algún refugio
en el que anclarse.
Cuando llega la noche no hay palabras
y el humo se revuelve en los silencios
como una cobra hambrienta.

Pero acerca tu mano, amor, tu mano
hacia la luna abierta de mi frente;
verás la magia antigua,
poderosa,
instalarse en los labios de una estrella
para hacer revivir cada palabra,
cada caricia, amor, y cada beso.

almond blossoms.


algo está sucediendo.


in love.


Cap. Frederick Wentworth

Todas las noches cruzo
los sueños para verte.
Descalzo las andadas escaleras
del cristal de la tarde
y, como en un deseo más que impuro,
organizo un encuentro con tus ojos
y con tu piel desnuda.
Me acaricio de ti,
tu piel afirma su silueta perfecta
para abrazar mi abrazo.
Y, en la cómplice cueva del secreto,
comienzan nuestras sombras
a relatar leyendas, cuentos, mitos,
incluso profecías de otras noches
tal vez en otros cuerpos reencontrados,
tal vez en otras vidas.
Después, cuando se impone
la estéril realidad de un día nuevo,
solo me restan sordas vaguedades
y la necesidad insana de decirte,
- aunque nunca lo haré, posiblemente -
que cada noche cruzo
los sueños para amarte.




también hacia la luz y hacia la vida.


shining.



Junto a todos tus besos
tengo guardadas cuentas y botones,
un nombre que me llena de palabras
y los miles de estrellas de tus ojos.


Junto a todos tus besos
tengo guardado el tiempo que te extraño,
la gastada silueta del silencio
y también las sonrisas que te brotan
en las noches de luna.

simplemente magia