XIX.



Cuando encienden mis labios esos muros
que creamos con tiempo y con excusas,
el mundo se hace espalda,
viga o reja
que separa el insomnio de los sueños.
Tantas fábulas pueblan las esquinas
de este collage enfermo del olvido…
Tantas palabras sordas,
tanto margen…
Y no reconocerte siempre cerca
detrás de los secretos.
Cuando encienden mis labios esos muros,
renombro las fronteras
y separo tu tiempo de mis alas.

setting sun.


...e che sospiri... la libertà.


mi horizonte.


No puedo darte más.
Me tiembla el alma
cada vez que me pongo de puntillas
para hacer que mi luz llegue a tus ojos.