Ocurre que hay poemas que son míos
y hay otros que son yo
en cuerpo y alma.

En las noches de rock soy como un fuego
y me apasiona acariciar tus labios
con besos de palabras.

En las noches de blues soy una brisa
que se aferra a tus ojos como estrellas
y llora tus silencios.

En las noches de ti, cuando las puertas
se despojan de rejas y candados,
te dedico poemas
que dicen mucho más que las palabras
y con ellos te entrego cuanto siento,
cuanto soy desde ti, por ti, contigo.