nana.

Te amo cada segundo, cada hora,
cada nueva mañana, cada noche,
te amo tras cada esquina, en cada paso,
en cada sonreír, en cada nombre.
Te amo porque salpicas en mis hombros
la magia de dos alas y de un vuelo,
la magia de los mundos que se pierden
en el magma infinito de los sueños.
Te amo cuando me hablas, cuando callas,
cuando vuelves a mí, cuando te alejas,
te amo siempre, mi vida y, para siempre,
irá escrito mi amor en tus estrellas.